Resumen
La ciudad y lo que se entiende como su realidad, es una construcción compleja e infinita que se teje entre su naturaleza intangible, como la memoria, las emociones, las ideas, los sentidos; y sus definiciones tangibles, como las formas físicas, los edificios, los acontecimientos ciudadanos. Esta relación recíproca que vincula lo imaginado con lo empírico de los territorios, es la base fundamental de la producción del espacio urbano, un proceso que postula a la urbe como una obra en desarrollo en donde sus formas y discursos se transforman constantemente según la esencia y acciones de sus habitantes. Esta postura se contrapone con el imaginario urbano denominado “Barrios del Sur”, en San José, Costa Rica. Un compilado de símbolos mayoritariamente negativos utilizado para designar de manera dominante al territorio Sur del Casco Central. Esta imagen no es flexible, no muta, no se actualiza, ya no es fruto de su relación con la propia experiencia y el sentido territorial, lo cual plantea una crisis productiva del espacio urbano. La presente investigación surge de la necesidad de comprender fenómenos y características que coadyuvan a una relación crítica entre los aspectos tangibles e intangibles del territorio, explorando las posibilidades de la Arquitectura y el Urbanismo, como campos implicados en las dinámicas socio-espaciales de la ciudad, en el planteamiento de interpretaciones y alternativas a la problemática. El trabajo se realizó en tres etapas: La primera trata de un acercamiento teórico/ conceptual para comprender el vínculo entre lo imaginado y lo empírico de la ciudad, sintetizado en un diagrama de interpretación que se denomina Estructura de Producción del Espacio Urbano. En una segunda etapa se realiza un Retrato o análisis territorial de Barrios del Sur y Barrio Cuba según el discurso dominante para identificar sus implicaciones en la organización, diseño, inversión, planificación y experiencia urbana. Como etapa final, se proponen vías y herramientas de actualización productiva del territorio desde el concepto de Imaginación, un proceso que no sólo atiende a la percepción y procesamiento de todo lo que está creado, sino que es creación en potencia, y por lo tanto, posibilita ejercicios de crítica y alternativas de respuesta a esquemas dominantes de representación que afectan las dinámicas con que se produce la ciudad y lo que se entiende como su realidad.